Sueños: Orígenes

Los sueños es una realidad poderosa, es decir ¿quién puede asegurar que nuestro día a día no es un sueño? Tal vez todavía estamos en medio de un sueño del cual no hemos despertado pero que está bien diseñado, tanto lo es, que se completa nuestra vida con ellos.

Si logramos interrumpir en un sueño de manera consciente, tanto como para dominarlos a nuestros caprichos, por qué no hacer eso en la realidad, acaso si en los sueños todo parece verdadero que puede tener la realidad para no ser manipulada como un sueño.

Desde que nos formamos en el mundo soñamos y cada vez que crecemos nos llenamos de nuevas experiencias y estas alimentan nuestros sueños, tanto así que cada vez existen nuevos elementos que los forman, por ejemplo lo que no nos gusta, nuestros temores o simples monstruos que convierten nuestros sueños en pesadillas, pero si aprendemos a dominar nuestro sueños y controlarlos podemos hacer que todo esto cambie y desaparezca lo que no nos gusta.

Sí siempre que dormimos soñamos, no siempre nos acordamos de ellos, sí son tan importantes por qué olvidarlos tan rápido, o que pasa en la realidad que nos marca tanto, para que en medio de nuestro descanso sigamos viviendo eso, los sueños podrían ser nuestra otra vida, a veces somos protagonistas de nuestros sueños pero no siempre somos los mismo que cerramos los ojos y empezamos a soñar.

Los sueños son más reales de lo que podamos pensar aun cuando todo lo que pase en esto sea aparentemente imposible, por ejemplo el hecho de soñar que uno puedo volar, la sensación es tan real que si en realidad pudiéramos hacerlo se sentiría igual, lo increíble es cómo la mente puede hacernos sentir algo que no conocemos, pero sabe la sensación para trasmitirla a través de los sueños y así pasa con cada cosa hasta que llega la hora de levantarse.

Me encanta la idea de las “patadas” en los sueños, sobre todo si ocurren en lugares menos indicados, digo, no siempre estamos soñando en nuestra querida y cómoda cama, que pasa cuando pasa en un bus, o en algún lugar donde esta no solo nos trae de vuelta a la realidad si no a la cruda realdiad de ser juzgados por quedarnos dormidos. Pero esta patada también tiene mucho significado, podría ser el tope entre la realidad y los sueños, tan fuerte es la sensación del sueño que se pasa a la realidad y esto hace que el sueño se rompa para despertarnos de una forma bien brusca o algo ruda.

Pero también es agradable el levantarse sin sacudidas ni sustos simplemente abrir los ojos y saber que todo fue un sueño junto con una gran sensación que pudo a ver sido la mejor aventura de tu vida.

Esta película del origen puede mostrar de una forma más consiente lo que es un sueño, claro un sueño que se prepara con un fin, o tal vez un simple sueño que está bien dominado pero que no se sabe en qué momento esto pueda afectar nuestra realidad.

By Camilo Dimaté